La Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos en voz de su secretario ejecutivo, doctor Álvaro Leiva Sánchez, dio a conocer la denuncia por Genocidio Viral en contra del dictador Daniel Ortega, Rosario Murillo y sus funcionarios que no han tomado acciones frente a la pandemia del COVID-19 que se expande en Nicaragua.
“Como acción inmediata a favor de la salud del pueblo nicaragüense hemos decidido denunciar a José Daniel Ortega Saavedra y a todos sus cómplices ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y otras instancias por el delito de genocidio viral”, expresó Leiva Sánchez desde ANPDH.
El Ministerio de Salud dominado por los sandinistas permanecieron en silencio estatal por 7 días consecutivos sin brindar información de los casos sospechosos de COVID-19 en el país, y en los días posteriores, las cifras brindadas por los funcionarios del MINSA no coinciden con los reportes de los ciudadanos que de manera independiente han documentado con vídeos y denuncias a través de las redes sociales, y además, no coinciden con los números de transportistas devueltos desde la frontera sur de Nicaragua con síntomas sospechosos de COVID-19, que según el Ministerio de Seguridad Pública de Costa Rica ya suman 33 los trabajadores del volante.
“Durante los últimos días y ante la falta de información de parte del régimen o el suministro de las mismas en forma parcial y poco creíbles; médicos y periodistas independientes, así como pobladores en general han venido reportando a través de las redes sociales y acelerado aumento de casos sospechosos en diferentes comunidades. Así como el incremento de fallecimientos por infarto o por neumonía atípica como forma de encubrir que la pandemia ya está causando graves estragos en Nicaragua”, cita el comunicado leído por el doctor Leiva Sánchez.
El doctor Álvaro Leiva Sánchez dice que se ha documentado el llamado irresponsable por parte del régimen Ortega Murillo para acudir a concentraciones masivas en avenidas y calles de Managua y otros departamentos ignorando las medidas sanitarias orientadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
“El dolo o mala intensión con la que el régimen ha venido abordando la emergencia ante la pandemia del COVID-19 en donde todos sus actos y declaraciones han venido apuntando a la promoción de un contagio masivo de la población indefensa se constituye oficialmente en la comisión de un delito más por Daniel Ortega Saavedra y sus funcionarios a cargo de la salud pública del pueblo de Nicaragua como es el delito de Genocidio viral”.
Según el doctor Álvaro Leiva Sánchez “el genocidio viral es una figura jurídica internacional que fue ejercitada en una primera instancia por su santidad el Papa Francisco y que realmente es un término que encaja cuando en el ejercicio de la función pública una persona tiene la capacidad de ejercer su función para salvar vida y no la realiza por omisión”.
